Por Avryl Rodríguez Granados
Estando próxima la segunda marcha con motivo de defensa del Instituto Nacional Electoral, es necesario recalcar la importancia de este movimiento.
Nuevamente, los ciudadanos saldrán a las calles de la Ciudad de México así como de las más de 90 ciudades de nuestro país y del mundo para manifestarse a favor del INE, de la democracia, de las libertades y en contra del Plan B electoral.
Plan, que por cierto, el día 22 de febrero del año en curso fue aprobado en el Senado de la República. La última instancia será la judicial, donde esperemos que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación liderados por la nueva presidenta de la Corte, la ministra Norma Piña, frenen esta reforma a leyes secundarias que no solo es inconstitucional, sino dinamita de fondo la estructura profesional del INE. Es de aplaudir, que el ministro Perez Dayán ya se pronunció al respecto suspendiendo parte del Plan B porque “las modificaciones en propaganda gubernamental generan afectaciones irreparables al sistema democrático y a los derechos fundamentales”.
La lucha electoral sigue, es trabajo de las autoridades y particulares en lo individual y colectivo resistir las actitudes intolerantes, discursos de odio, diálogos polarizantes, descalificación, fake news y la censura a las expresiones que difieren con el ideal oficialista. Hoy por hoy, la Corte sigue recibiendo amparos de trabajadores del Servicio Profesional Electoral Nacional del INE que serán despedidos, con la exigencia de reconocimiento y protección de sus derechos laborales. Son más de 5 legislaciones incluida la Constitución que presentan controversias constitucionales debido al Plan B electoral.
Los avances en el sistema electoral han sido enormes, el Tribunal Electoral ordenó que la siguiente presidencia del INE sea presidida por una mujer a fin de cumplir con los principios de alternancia y paridad de género. Datos del IDEA , refieren que las mujeres ocupan un 21% de la totalidad de cargos de liderazgo en los Organismos Electorales y gubernamentales alrededor del mundo. México será el responsable de aumentar ese porcentaje para abril de este año.
Este artículo, lo escribo con un profundo sentimiento de preocupación, puesto que la reciente elección de la senaduría en Tamaulipas, tal vez sea la última que siga su curso natural, con el mayor número de alternancia, gobernabilidad política y profesionalismo que solo garantiza el INE y sus trabajadores.
El domingo 26 de febrero cuando la gente decida salir en defensa del INE y del sufragio libre, será un impulso más para que las autoridades competentes se nutran de valentía y demuestren que sí se puede revelarse frente a condiciones opresoras.
La mejor manera de consolidar al poder en el poder es la ignorancia, así como la despreocupación por las problemáticas que nos aquejan como sociedad, en otras palabras, hacerse de la vista gorda ante esta tragedia electoral. Es momento de pintar a México de rosa, de defender una Institución que limita al poder, que vigila las elecciones, que resguarda nuestros datos personales y que fomenta la participación ciudadana. No regresemos a la época en donde “no se vota porque ya se sabe quién va a ganar”.
La libertad entendida como autonomía, es esa garante de tomar decisiones bajo el criterio de cada persona, es la capacidad de decidir por sí mismo la ruta o camino a seguir. No dejemos que nadie imponga desde una relación gobernante-gobernado condiciones de inequidad para el ejercicio de nuestros derechos político electorales.
Avryl Rodríguez Granados
-Estudiante en Derecho UNAM
-Feminista y activista social
-Apasionada del Derecho Constitucional y Penal
-Diploma en “VIII Congreso Internacional de Derecho Constitucional” por la SCJN
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